Andábamos locos con que 0,60 céntimos eran veinte duros, o que 5.000 pesetas eran 30 euros. Con la calculadora conversora en el bolsillo. E intentando entender qué era eso de “internet” y las páginas web, o lo que había ocurrido con las empresas “puntocom”. Era el año 2002 cuando un 21 de junio nos fuimos a la notaría para firmar las escrituras de constitución de la empresa Arqueología y Diseño Web Sociedad Limitada. Nació Arqueoweb, nombre que años después cambiaríamos a Patrimonio Inteligente. Por lo tanto, si la memoria y los cálculos de los presentes ese día no nos han fallado, acabamos de cumplir 20 años como empresa.
Decidimos recoger todas las inquietudes alrededor de la innovación y las tecnologías de la información y comunicación y aplicarlas al campo que nos apasionaba, la Arqueología. En contra de muchas recomendaciones, fundamos nuestra empresa con el ánimo de trabajar en lo que nos gustaba y con quien nos gustaba. Por eso empezamos con proyectos de diseño de páginas web compatibilizándolos con la realización de intervenciones arqueológicas.
¿Algo loco verdad? Pues era así como muchos nos veían.
Han pasado muchas cosas desde aquel lejano 21 de junio de 2002: burbujas, crisis, pandemias, pero sobre todo, mucho trabajo. Nosotros hemos cambiado mucho como empresa (nombre incluido) y como personas. Hemos conseguido pasar de ser un proyecto personal para los socios, a una empresa ya consolidada. Y sin embargo hemos mantenido algunos objetivos que nos pusimos en origen: trabajar en lo que nos gustaba y con quien nos gustaba.
Es un placer haber llegado a este momento con vosotros.
Ahora se nos abre un camino apasionante. Gracias a la implicación y el trabajo de todo nuestro equipo tenemos un futuro cercano lleno de proyectos y nuestro único deseo es poder desarrollarlos juntos, de la mejor manera posible.
Nos vemos en el camino de los próximos 20 años.
Fran Ramos
