Como te he comentado en otros artículos, la mayoría de Ayuntamientos cuentan con cartas arqueológicas donde se tienen localizados los yacimientos arqueológicos conocidos del municipio. Pese a esta recopilación (estos yacimientos son “conocidos”, o al menos se sabe que están ahí) en alguna ocasión aparecen yacimientos arqueológicos de los que no se tenía constancia debido a obras y estos yacimientos que aparecen necesitan ser gestionados. Hay que decidir qué hacer con ellos claro.
Y la Arqueología preventiva trata de trabajar esto aunque, conocidos o no, siempre hay yacimientos arqueológicos que gestionar y no siempre está tan claro cómo.
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La contradicción de la Arqueología. Excavar o no excavar
Puede parecer estúpido pero sí. Esta cuestión se plantea muchas veces en Arqueología. Es cierto que la naturaleza de la disciplina no tendría sentido sin la excavación. De momento es la fuente principal de conseguir información de un yacimiento arqueológico. Pero como sabes, excavar conlleva irremediablemente a la destrucción del yacimiento. Lo cual no deja de ser también paradójico. La Arqueología destruye lo que por otro lado trata de preservar.
[Tweet “La #Arqueología destruye lo que por otro lado trata de preservar.”]
A pesar de que contamos con un gran Patrimonio Arqueológico, éste no se crea de la noche a la mañana. Y cuando ya se ha excavado un yacimiento, no se puede volver a excavar ni recuperar. Esto plantea desde hace años un debate dentro de la Arqueología.
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¿Excavamos los yacimientos o los conservamos in situ sin excavar?
Si los excavamos, ya te digo que los destruimos, pero si no metemos rasqueta, no podremos obtener información de ellos. Pues bien la Arqueología Preventiva tiene una respuesta al respecto:
Es conveniente preservar yacimientos arqueológicos sin excavar para que futuras generaciones puedan investigarlos.
Gozamos de mucho patrimonio Arqueológico descubierto y conservado que nos permite desarrollar todo tipo de investigaciones y además, no debemos guiarnos sólo por las directrices marcadas por la explotación urbanística para llevar a cabo las excavaciones arqueológicas.
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Y te preguntarás ahora. ¿Qué es la Arqueología Preventiva?
La Arqueología Preventiva es el nombre por el que se conoce a las actividades de protección y gestión del Patrimonio Arqueológico en relación con la obra pública.
Muchos yacimientos generan ciertos problemas administrativos debido a que se encuentran en suelo urbano y una obra pública o privada intenta construir sobre ese yacimiento con lo que hay que establecer un proyecto y un plan de actuación, bien sea para salvar le yacimiento o para protegerlo.
¿Y quién lleva a cabo este proyecto?
En general se desarrolla desde la administración pública con sus departamentos de Cultura y equipos de Arqueología. Pero desde las empresas privadas como nosotros también nos dedicamos a gestionar este impacto de la explotación urbana sobre el Patrimonio Arqueológico. Por tanto, es un proyecto en el que se involucran diferntes instituciones públicas y empresas privadas.
El principio básico y fundamental a partir del cual funciona la Arqueología Preventiva es que los yacimientos arqueológicos son finitos. Por eso, nos planteamos si es lo más recomendable la excavación de yacimientos como recurso investigador. No siempre es lo más apropiado excavar el yacimiento porque de ser así, no contaríamos con yacimientos arqueológicos para el futuro. No existirían.
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Proteger el Patrimonio Arqueológico de la explotación urbana.
Por esta razón, siempre se defiende desde la Arqueología Preventiva (y desde el Patrimonio Cultural en general) la conservación por encima de la intervención. El objetivo de este tipo de Arqueología (relativamente moderna) es desligar la explotación urbana de la explotación del Patrimonio Arqueológico.
¿Y cómo podríamos conseguir esta difícil tarea?
Para empezar se debería regularizar el suelo urbanizable de forma diferente, evitar la explotación descontrolada y proteger determinadas zonas donde se encuentren restos arqueológicos. Se trata pues de paliar el daño que una obra pudiera ocasionar a un yacimiento arqueológico.
¿Pero cualquier resto arqueológico debe protegerse?
Evidentemente no. Esto sería otra tarea. Establecer prioridades y baremos para identificar y catalogar los diferentes tipos y niveles de Patrimonio Arqueológico y las diversas intervenciones a realizar dependiendo del tipo de yacimiento arqueológico.
Es un tema realmente complicado. En la actualidad, la empresa de Arqueología actúa cuando aparecen los restos. Con los propósitos de la Arqueología Preventiva, se debería tener un plan de acción previo (las Cartas Arqueológicas son una de las medidas) para evitar realizar trabajos deprisa y corriendo para seguir con la obra, y desarrollar Proyectos de Ordenación Urbana conjuntos teniendo en cuenta a l@s arqueólog@s y elaborar estos proyectos teniendo en cuenta el Patrimonio Urbano.
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Características de la Arqueología Preventiva
En conclusión, este tipo de Arqueología, tal y como su propio nombre indica, se centra en gestionar el Patrimonio Arqueológico con el principio de no intervenir (no excavar) el yacimiento arqueológico para preservarlo para el futuro. Y para esto, se centra en actividades poco invasivas como la prospección y evaluación del Patrimonio.
Pero por mucho que desde la Arqueología intentemos establecer principios para conservar los yacimientos arqueológicos y para establecer un desarrollo urbano sostenible, no se podrá conseguir sin el apoyo e implicación de las instituciones públicas y la sociedad que son las que se encargan de gestionar lo público.